Con la técnica de eyetracking obtenemos tanto datos cuantitativos (tiempos necesarios para una primera fijación de la mirada en diferentes áreas de interés, duración total de la visualización de esas áreas de interés o el porcentaje de personas que han fijado su mirada en diferentes áreas seleccionadas) como visualización cualitativa (HeatMaps o Gazeplots)
de cómo una persona ha interaccionado con un estímulo visual.
La visualización de las imágenes grabadas con los datos de eyetracking permite a la persona entrevistada tomar conciencia de la interacción con los objetos percibidos. Se convierte en una guía para profundizar en los aspectos funcionales o disfuncionales y qué aspectos pueden ser mejorados.
En la técnica del ‘retrospective think aloud’ o reflexión en voz alta retrospectiva podemos indagar cuales son los focos de atención y de qué manera se relacionan entre ellos a la hora de crear un significado determinado u orientar la toma de decisiones y el curso de la acción de la persona observada.